LUNA DE AGOSTO...

Se enciende la luna, ella guarda mi alegría, ella esconde mi paz… Se enciende y suspendida en el vacío me enseña que en el abismo emerge la vida, que en la oscuridad se esconde el origen…

Y tú eres mi abismo, incertidumbre de no tenerte conmigo y no saber cuándo, de no ubicar un dónde y seguir caminando… Abismo en el que me sumerjo, sin fin y sin principio, tú eres mi abismo en donde nada mi fe y se pierde dudando sin encontrar salida, sin reconocer su lugar. Abismo de mil caminos, de mil vidas, de mil intentos…

Y tú eres mi oscuridad, en donde camino ciego confiando en tu voz, en el recuerdo de tu voz, que aun no se apaga porque tu voz, dulce y serena, trasciende el tiempo… Mi oscuridad, densa niebla que cubre mis días, y no me permite llegar al final, miles han sido el origen de mis días, días que no llegan al final porque se esconde en tus brazos, y aun no te encuentro…

Observo la luna, cerrando mis ojos, luna eres tú que brillas en mí, que te suspendes en los aires que rodean mi alma, que señalas el centro de la existencia que existe dentro de mí, luna que dicta el ritmo de mis andares, y hay noches dentro de mí en las que la luna se ausenta, y me siento perdido, y me ausento yo mismo, camino sin paz cuando te ausentas luna, camino sin alegría, sintiendo el vacío, observando el abismo…