martes, 7 de septiembre de 2010

¿REALMENTE ES ASUNTO DE DIOS?

Fue lamentable lo que ocurrió, y fue exactamente hoy cinco de septiembre entre las ocho y nueve de la mañana. La doña de aproximadamente sesenta años de edad decidió ir en autobús a Punto Gorda, un pequeño municipio de la Costa Oriental de Lago, ubicado a cuarenta y cinco minutos del Consejo de Ciruma, pueblito en el que ella vivía; en realidad habría ido en carrito por puesto y entonces habría evitado cruzar la intercomunal, el asunto es que no habían carritos en la parada así que se sentó en la plaza un rato y pasó el autobús y se embarcó. La doña no iba sola, pero la sobrina que iba a acompañarla se quedó dormida y ella no quiso esperar a que se hiciera más tarde porque le urgía ver a su hermana que yacía postrada en cama desde hacía días.


El autobús la dejó en la parada de Punta Gorda y del otro lado de la intercomunal estaban algunos sobrinos suyos atendiendo un puesto de comida, ella cruzó la calle sin que ellos pudieran notar su presencia al otro lado hasta que escucharon un impacto y al mirar hacía la avenida vieron el cuerpo de su tía, la doña Rosa, rebotar sobre la calle de asfalto… De inmediato corrieron hasta el cuerpo, una ambulancia del cuerpo de bomberos pasaba por el lugar en ese momento así que sin perder tiempo fue trasladada al hospital de Cabimas al que entró con vida murmurando algunas palabras sin sentido, y al cabo de unos minutos murió.


Diez minutos después de su muerte yo estaba sentado en la Plaza Las Banderas del Consejo de Ciruma, estaba allí porque había decidido caminar un rato por el pueblo y sentarme en ese lugar para pensar en mis próximas decisiones, frente a mí una señora abrazaba a otra y la escuché claramente cuando dijo “tía Rosa murió”. Minutos después supe que se trataba de la doña, madre de un par de amigos míos. Al anochecer supe que ya habían traído el cuerpo al pueblo y fui al hogar de la familia Gutiérrez para apoyarles en su dolor. Al llegar encontré en el patio a todos sentados alrededor de un hombre con una Biblia en su mano, que decía ser pastor cristiano, el tipo sonreía como un loco, y decía cosas como que “los ángeles estaban de fiesta en los cielos por la muerte de la doña” y que él también “se alegraba porque ella estaba en su verdadero hogar”. Pensé en qué diablos podía haber fumado aquel hombre para tener los cojones de pararse frente a los familiares dolidos y decir que habían ángeles haciendo parranda por la misma razón que ellos aquí en la tierra lloraban y querían morir también. Pero lo que me llevó al borde de mi cólera silente fue la frase con la que terminó su discurso antes de hacer su “oración por la fortaleza de los familiares de la doña”, él dijo: “la muerte de la doña Rosa es asunto de Dios”.


Allí está mi problema con quienes se hacen llamar representantes del cristianismo, o “embajadores de Cristo”, allí está mi problema con estas sectas que se hacen llamar cristianas o que no sé si lo son, no soy experto en cristianismo, pero sé que si eso es cristianismo entonces es un asco, un insulto a la esperanza de una mejor expresión humana. Allí está mi problema con los “conceptos heredados que definen al Dios cristiano”, y me jode más la paciencia el hecho de que insistan en llamar a tal concepto “Dios verdadero”. Intentan interpretar lo que desconocen con un “es asunto de Dios”, intentan callar el dolor y reprimirlo con un “es asunto de Dios”, ¿por qué es asunto de Dios? ¿Acaso solo lo dicen porque no pueden entenderlo? ¿Es Dios la respuesta fácil a lo desconocido? ¿Es Dios una respuesta elaborada, prefabricada, todo uso? Hubo un terremoto en Haití: Asunto de Dios; un accidente en las minas de Chile: Asunto de Dios; un fallo en el veredicto a favor de la injusticia: Asunto de Dios. ¿Qué Dios es ese? Tal vez uno que merece mi desprecio, si en realidad existiera.


Yo sigo mi búsqueda, realmente no puedo aceptar a ese Dios prefabricado por religiones, por pensadores que se limitan a respuestas tan dañinas y tontas como “asunto de Dios”. No aceptaré jamás la existencia de un Dios que solo es una herramienta genérica para el hombre, ni siquiera si me ofrece mil cielos con parrandas de ángeles, ni siquiera si me amenaza con mil infiernos de lagos de fuegos que nunca se apagan.

3 comentarios:

Mi Ser dijo...

Amigo Mio....

Dios así como lo describes tampoco es de mi interés conocer... Respeto tu critica...

Yo prefiero pensar que cada uno es Templo de Dios... una Parte de él... aunque muchos ignoren aquella parte.... Cuando hay alguien que llora la injusticia como tú... Esa parte... es huella de Dios... Cuando muchos ayudamos y oramos por el terremoto... Pues esa es otra cara de Dios... reflejada en nosotros.... Para Mi... no hay otro Dios... que la Obra que con FE construimos...

Sabes algo.... cuando dejas de encontrar el brillo de Dios en lso detalles de la Vida... Te Vuelves como aquellos que llaman cristianismo a azotar sus propios miedos y cobardías.... a aquellos que en nombre de las "Cosas de Dios".... No hacen NADA por nuestra Humanidad...

Abrazoles Amigo...
Buen Post..
Mi Ser.

GUSMAR SOSA dijo...

Saludos, gracias por leer. Allí vamos, intentando encontrar.

Germán Ortiz dijo...

Lee este post, está relacionado a lo que escribiste.
http://lavidaabsurda.blogspot.com/2010/08/el-libre-albedrio-la-excusa-para-no.html