Y va cayendo la lluvia, por estos mundos, mientras camino, cae la lluvia… Y voy avanzando yo sin detenerme, como agua de lluvia que desciende o asciende hasta aquí, yo no sé si voy o regreso, si me alejo o me acerco…
Tal vez perdido estoy, como la lluvia que al caer no sabe si pertenece o no al suelo donde cae, pero sin remedio ni opciones se deja llevar y va corriendo a ningún lugar… A ningún lugar voy yo desde que no estás, y no sé si estuviste pues no hay recuerdos claros, no existen los recuerdos claros, solo son suaves brisas que golpean, violentas caricias que acarician, y van y vienen como danza la lluvia que se deja llevar, mientras desciende o asciende, por la brisa que tal vez es viento recio…
Y yo no sé qué soy sin ti, no sé qué podré ser contigo, solo sé que te busco desde el amanecer, y al caer la noche sigo buscando dentro de mí imágenes que puedan hablarme de ti y que me permitan entender por qué te pienso sin haberte encontrado…
Va calmando su ritmo la lluvia, calmada, tal vez cansada, quizá mañana volverá, quizá entre los aires se perderá y nunca más yo vuelva a sentir su frío, o puede que un día me una a ella y descubra sus caminos; yo no encuentro calma sino estás, yo no entiendo la calma sino estás, yo no podré ser calma sino estás…
Tal vez perdido estoy, como la lluvia que al caer no sabe si pertenece o no al suelo donde cae, pero sin remedio ni opciones se deja llevar y va corriendo a ningún lugar… A ningún lugar voy yo desde que no estás, y no sé si estuviste pues no hay recuerdos claros, no existen los recuerdos claros, solo son suaves brisas que golpean, violentas caricias que acarician, y van y vienen como danza la lluvia que se deja llevar, mientras desciende o asciende, por la brisa que tal vez es viento recio…
Y yo no sé qué soy sin ti, no sé qué podré ser contigo, solo sé que te busco desde el amanecer, y al caer la noche sigo buscando dentro de mí imágenes que puedan hablarme de ti y que me permitan entender por qué te pienso sin haberte encontrado…
Va calmando su ritmo la lluvia, calmada, tal vez cansada, quizá mañana volverá, quizá entre los aires se perderá y nunca más yo vuelva a sentir su frío, o puede que un día me una a ella y descubra sus caminos; yo no encuentro calma sino estás, yo no entiendo la calma sino estás, yo no podré ser calma sino estás…
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