viernes, 29 de enero de 2010

PARA TI ESTE AMOR DE OTROS SIGLOS...

Llevo algunos días trabajando en nuevos esfuerzo dirigidos a proyectos pendientes, nada nuevos más bien antiguos en el mundo de las planificaciones suspendidas… Este empeño ha afectado el ritmo al que estoy acostumbrado publicar todo lo que ya está almacenado. Yo pienso que el tiempo es uno y nosotros nos movemos en esa unidad del tiempo intentando fraccionarlo para entender mejor lo que hemos llamado vida. Lo comento porque necesito hacerlo en estos días cuando se hace difícil salir de esas trampas “fraccionarias” que a veces no solo dividen nuestra percepción del tiempo sino que también atentan contra la percepción de uno mismo… No sé si alguien puede entenderme… Bien aquí comparto con ustedes uno de los resultados de la magia del invierno… Espero pronto actualizarme con los resultados del inviernos… Y no olviden que Haití somos todos y que seguirá doliendo porque es necesario que así sea, que no olvidemos e ignoremos ese dolor que debe llevarnos a hacer lo que podamos hacer por Haití que res tú y que soy yo…


“Para ti, que sueñas conmigo mientras yo recorro, en busca de socorro, laberintos inciertos con la fe débil en un encuentro que he visto en la bondad del tiempo…

… Que te enredas entre mis recuerdos sin haber sido instante y sin ser presagio, que atormentas como un fantasma que dejando escuchar susurros gratos se esconde entre las sombras de la oscuridad.

Para ti, que eres rayo de luz en mi densa oscuridad…

… Cuya sonrisa dibujo a pulso y con esfuerzo para no olvidarla y así atraparte y sostenerte en mis manos cuando aparezcas… Rayo de luz, que cayendo sobre mi me inspiras; diosa de mis soledades, a quien oro cada madrugada con letras propias y sin falta…

Ángel de ausencia a quien entrego mi protección en un suspiro, a quien confío mi cuidado en un deseo mientras me cuelgo a la suerte de mil caminos, que bailas donde estuvo mi alma, que juegas donde estuvo mi corazón, que me guías a otros mundos en mi empeño de tenerte…

Para ti, que me lees, no sé si hoy, mañana o en mil años…

… Cuya mirada se fija en mis letras, oraciones pronunciadas en dos siglos, letras que son tuyas pues se forjan en ti; cuyos labios sonríen porque saben el nombre de mi secreto pues mi secreto eres tú…

Dueña de mis madrugadas, sol de las tardes que alimentan mis dudas… Dudas, fundamento de mi fe… Fe con la que te busco sin saber dónde estás, y si realmente estás… Tú eres el país donde espero nacer, donde nunca más seré forastero, de donde no querré partir jamás…

Para ti, único cielo a donde apuntan mis pretensiones…

Para ti es este amor que envejece y no se rinde, que no acepta extinguirse ni treguas ni nada… Amor de otros siglos que sobrevivirá en el tiempo hasta encontrarte…”

4 comentarios:

Anónimo dijo...

ESO lo escribiste vos? es demasiado perfecto para ser real,para que tenga dueña de carne y hueso en esta existencia objetiva y material. Para mi que es de sueños...
Pase de curiosa y preguntona nomas, me sorprendí, que tengas lindo día!

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Me hiciste retroceder en mi blog y me acorde que a veces uno escribe sobre algo real de forma bastante irreal.. Una cuestión de formas
y mejor aun: La bella urgencia

GUSMAR SOSA dijo...

Saludos, gracias por visitar, sí lo escribí... Me alegro que te guste, pasearé por tu blog.